Por las calles y carreteras de nuestro país han circulado numerosos modelos distintos de coches. Sin embargo hay algunos que han permanecido más en nuestra memoria por diversas circunstancias. Quizás por peculiares diseños, características especiales o simplemente por sentimentalismo ya que era el coche de nuestro abuelo o nuestro tío.
En los 70-80 no había tanta variedad de modelos como hay en la actualidad y además no todos los miembros de la familia tenían coche. Por ello el parque automovilístico español era más aburrido y repetitivo. Hoy en día, todavía se pueden ver algunos conducidos por personas mayores que en su día los compraron, también por coleccionistas nostálgicos pero en la mayoría de los casos han desaparecido y han sido desguazados. Obviamente los SEAT son los más cañí por el origen español de la marca pero otras marcas extranjeras habituales, que en algunos casos también se fabricaron en España, también las hemos considerado como tal ya que ciertos modelos fueron muy populares.
Seat 1430
Es el coche de Torrente, con eso está todo dicho. Fue un vehículo muy popular. El taxi por antonomasia. Nació en 1969 como copia de un modelo FIAT 124. En su época se labró una fama de modelo elegante e incluso fue utilizado para carreras. Su motor inicial era gasolina, de 4 cilindros en línea de 1.438 cm³ y llegaba a alcanzar los 155 km/hora
Seat 131
Era un coche con empaque, grande, robusto, alejado de las líneas de los utilitarios 127. Fue un coche utilizado por empresarios, políticos y familias pero también tenía su estilo deportivo dada su potencia de motor y fiabilidad. De hecho, fue utilizado para carreras y en los últimos años cuando estaba algo pasado de moda lo utilizaron muchos jóvenes que lo heredaron. Se empezó a producir en 1975 y su potencia llegaba a los 95 Cv y a los 1.592 cm³. Tomó el relevo del 1430 aunque convivieron durante muchos años.
Simca 1000
Fue muy popular en los ochenta tanto que incluso Los inhumanos lo incluyeron en una famosa canción. “Qué difícil es hacer el amor en un Simca 1000, en un Simca 1000..”. El motor estaba detrás y el maletero delante, su cilindrada era de 944cc y su consumo no era excesivo. La siguientes versiones fueron ganando en potencia y en acabados.
Seat
600
Con él se inició la fiebre del automóvil en nuestro país. El clásico por antonomasia, es la imagen animada del boom económico de los 60. En pleno desarrollo su adquisición suponía para una familia entrar en el progreso. Se fabricaron desde 1957 y se vendieron como churros incluso había hasta lista de espera para adquirirlo. Era una copia del FIAT 600 y tenía un potencia de 21 CV con 633 cm³. Llegaba a los 95 kilómetros por hora y su consumo de combustible era irrisorio, 7 L / 100 km.
Seat 850
Era una evolución del 600. En España comenzaron a fabricarse en 1966 (En Italia 1964). El motor (843 cc y) estaba ubicado en la parte de atrás y el maletero adelante. Sus 37 caballos le permitían llegar a los 125 km/h Era un vehículo de clases populares sin alardes. Su falta de ventilación le restaba fiabilidad en trayectos largos ya que los sobrecalentamientos del motor eran un problema habitual cosa que no solía ocurrir con los recorridos cortos de ciudad donde además destacaba por su maniobrabilidad.
Seat 127
Pequeño compacto, ideal para familias pequeñas. Era un clásico de las carreteras españolas e ideal para ciudad por su muy aprovechado tamaño, tanto interior como exterior. Era el heredero natural del Seat 850. Comenzó a fabricarse en 1972 y acabó en 1982 cuando acabo siendo sustituido por el Seat Fura, una clara evolución del 127 que pretendía extender su reinado cuando dicho modelo ya era del pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario